prometí, no mencionar tu nombre
olvidar tu olor y tu voz,
prometí esconder en lo mas profundo
de mi ser, todo lo que me recordara a ti
prometí, olvidar cada lunes, cada viernes
cada día, minutos y horas que viví junto a ti
prometí en mi dolor, no sufrir mas
me prometí a mi misma poderte olvidar
prometí, no buscarte ni hablarte
ni querer saber de ti,
los días pasan y no termino de comprender
como es que le hiciste para simplemente
seguir...
prometí borrar toda huella que me persiguiera
pero ni tu carro, ni tu voz, ni tu recuerdo
se quieren apartar de mi
por que para ser honesta, un día prometí
que seria para siempre
que estaría contigo fuera como fuera,
cuidarte y siempre orar por ti,
prometí tantas cosas y ahora me veo sin ti
y es un trago amargo que estoy tratando
de asimilar, te creía tan especial
y al final de cuentas me di cuenta
que eras un simple mortal
mortal que logre amar...
prometí mas de lo que debí prometer
y ahora no me queda mas
que extinguir todo tipo de promesa
ya ni siquiera recuerdo lo que fue
prefiero creer que fue un sueño
del cual simplemente ya desperté
sueño que a diario me sabe a pesadilla
y no quiero soñar mas...
y es así como todo sin pensarlo
llega a su fin, decepción dolor desamor
no lo podría definir...
tantas promesas que quedaron
sin cumplir, monumentos que se derrumbaron
sueños aniquilados, verdades
sin fundamento, realidades que no
pueden ir a la par,
por que como el agua y el aceite
finalmente eramos tan diferentes
no puedo decir que te odio
o que te deje de amar,
por que ninguna de las dos sería verdad
tampoco puedo decir que voy a cumplir
todo lo que prometí,
eso de borrarte, extinguirte, liquidarte,
suprimirte, matarte en fin todo lo que se le parezca
y mucho menos eso de amarte para siempre,
para siempre es algo demasiado extenso
como para que tu lo puedas comprender,
siempre supe que el final seria así,
por que te conocía mas de lo que tu a mi
y era lo único que podía esperar de ti
a estas alturas no te culpo
confirmo una vez mas
que fui demasiada mujer para ti
es la naturaleza del hombre la que muchas veces
no los deja ver, apreciar, cuidar, valorar
o simplemente reconocer
cuando a su lado tienen a una gran mujer
por eso prometí no llorar y no recordarte mas,
y muy a mi sorpresa varios días sin pensarlo
lo he logrado...
ya no tiene nada de mi, ni siquiera
mi pensamiento, solamente un buen recuerdo
por que en eso, a gritos, pidió convertirse,
a pulso gano, no mi desprecio,
pero si causarme un buen sufrimiento
se convirtió en un pensamiento que martilla
del cual en mi mente como dijo un día ya solté,
y solamente este día me doy cuenta
que todo esta bien...
prometo quedarme conmigo y ya más nunca sin mi
domingo, 17 de enero de 2010
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